Esto implica reconocer el esquema psicofísico propio que lo determina con un modo o patrón. Descubrir las particularidades del mismo: como es su cuerpo, como se expresa, que está más facilitado en él y que más trabado, como es su patrón energético, emocional, mental.
Además aprender herramientas para poder trabajarlo, para poder recuperar los movimientos espontáneos, liberando sus trabas, teniendo mayor libertad de expresión y más matices expresivos. Ser plásticos y dúctiles, para poder entrar en diferentes tonos emotivos
Las clases son una invitación para mover el cuerpo en una experiencia expresiva, La música con toda su diversidad, nos llevará a través de un viaje, donde encontraremos infinidad de matices que nos conforman, permitiendo que se expresen creativamente, en un rico intercambio con los demás integrantes del grupo.
Moverse, fluir, comunicarse con los demás, compartir, jugar, relajarse, emocionarse, alinearse, integrarse, aprender, disfrutar.
Nuestro trabajo busca integrar el cuerpo con la psiquis, para que todo nuestro ser pueda expresarse en una acción libre y creativa.